miércoles, 12 de marzo de 2014

¿Super Fun? Night

Tengo un problema con las series, de ahí esa semana 'desaparecida del mapa' y sin publicar ni una entrada. Los que seáis seriéfilos lo comprenderéis. Hace un par de semanas dejaron de emitir episodios de mis series favoritas. Como todas las que veo actualmente son estadounidenses, se es propenso a esos parones, ya sea por festividades como por emisiones de nuevos programas de televisión. Una persona que está acostumbrada a ver cinco o seis episodios por semana, ¿qué le sucede? Simple, hay dos posibilidades, bien aprovechas para hacer las tareas de clase, ponerte al día y demás, o puedes emplear todo 'ese tiempo libre' para comenzar esas series que tenías pendientes. He aquí el dilema, aunque por mi parte era demasiado obvio lo que iba a suceder a continuación. 

Si es una serie de una temporada, de 17 capítulos, de 20 minutos cada episodio, bueno... tiene un pase para ir poco a poco 'tirando' durante la semana, peeeeero... yo llegué a un nuevo nivel. Lo peor de todo es que soy consciente de que si no hubiese hecho las cosas de la facultad, hubiese sido capaz de superarlo. Yo me 'tragué' en ese tiempo la primera temporada de Super Fun Night (de 17 episodios concretamente), otros 17 de Mom (aunque no está finalizada la temporada todavía) y ¡cuatro temporadas de Downton Abbey! (serie que cada episodio le corresponde cerca de una hora y algunos incluso más). Bueno, y ahora que ha vuelto todo a la normalidad, incluyendo el inicio de la temporada de Once Upon a Time, me tenéis aquí. Ahora que leo todo esto, me resulta un tanto deprimente, pero bueno, cada uno tiene su afición.   

En este post vengo a hablaros concretamente de una de ellas: Super Fun Night.


Rebel Wilson ('Dando la nota', 'La boda de mi mejor amiga') da vida a Kimmie Boubier, una abogada freaky, con unos kilos de más que vive con sus dos mejores amigas. Las tres amigas dedican su vida básicamente a ver series, jugar a juegos de mesa y comer cantidades exuberantes de pizza. Boubier decide cambiar al ser ascendida en la firma donde trabaja; y con ella, arrastra a sus compañeras de piso. Comenzarán a salir por ahí a conocer gente, dando lugar a situaciones bastante embarazosas. 

                                  













La pintaban como la comedia del año, pero algo olía mal cuando el capítulo piloto se emitía en otro orden distinto al correspondiente. No estaba a la altura para enganchar al espectador y le doy toda la razón a quien tomó aquella decisión. 

No voy a negar que me gustó la serie, me reí. Tiene momentos divertidos, pero solo eso, toques. Lo cierto es que me esperaba más. Rebel Wilson tiene mucha gracia, pero no vale como protagonista, cansa. Los demás actores tampoco ayudan. Lo cierto es que sus papeles son algo flojos.

La serie es un cliché en su totalidad. Protagonista enamorada de alguien que cree inalcanzable, jefe guapísimo que se empareja con la mala malísima y esta última intenta destrozar la vida de la pobre protagonista. 

Quise verla porque pensé que podría tener cierta semejanza con The Big Bang Theory y Girls . Es lo que se lleva, dar voz a aquellas personas que nunca han sido los protagonistas, acercarse de alguna forma a una 'minoría' y también a una realidad, ya que no todos pertenecemos al mundo de Gossip Girl. Y hasta cierto punto lo consigue, pero no de la forma adecuada. 

El título no le va ni con pintura a la serie y es que de 'fun' tiene poco. 

Pero yo la seguí viendo. Le doy el sí con esperanza. Y se la recomiendo a los que buscan una serie amena para ver en la semana.


No hay comentarios:

Publicar un comentario